La violencia obstétrica ha sido definida de muchas formas, entre ellas como “los tratos crueles, inhumanos y/o degradantes que se ejercen sobre los cuerpos de las mujeres en situaciones de embarazo, parto y posparto por parte del personal sanitario”. Es la patologización, la medicalización y la cosificación de los cuerpos de las gestantes. Son violencia obstétrica todas las prácticas y conductas realizadas por profesionales de la salud a las mujeres durante estas etapas, ya sea en el ámbito público o privado, que por acción u OMISIÓN pueden ser percibidas como violentas. La lucha por la eliminación de la violencia obstétrica, se enmarca en la lucha por la defensa de los derechos sexuales y reproductivos; de la protección de los derechos de las mujeres a su autonomía, a su intimidad, a ser debidamente informadas, a su libre determinación, a la efectividad del derecho a la salud, a vivir una vida libre de violencias, etcétera.
Fragmentos de: Tierra de mujeres (María Sánchez)
«Desde las ciudades hemos visto como algo normal que la gente de nuestros pueblos no tenga el mismo acceso a los servicios básicos. SANIDAD, educación, cultura, infraestructuras. …
¿En qué momento hemos permitido que nuestros pueblos y sus habitantes no tengan los mismos derechos que los habitantes de las ciudades? ¿Porque seguimos perpetuando esta discriminación hacia el medio rural es habitantes agravando ya de por sí la desigualdad que sufren las mujeres? … Necesitan medidas para poder elegir, para no tener que irse a la fuerza. …
Queremos un medio rural feminista como una tierra llena de igualdad de oportunidades para las niñas del futuro, sean o no nuestras hijas»